Aquellas personas que quieran tener su propio negocio, sin necesidad de empezar en el mismo desde cero o que, por cualquier razón, sean propietarios de este y no quieran seguir manteniéndolo, tienen la opción de optar por el traspaso de negocios.
Se puede deber al motivo que sea (mala gestión, sector en declive o crisis,...), pero si estamos ante el caso de un ecommerce, en muchas ocasiones se debe a una mala elección de la plataforma de creación web.
Sin embargo, existe toda una serie de trámites que se tienen que llevar a cabo para completar el proceso.
Aquí detallamos todo lo que debes saber al respecto:
Antes de nada, es importante definir bien qué es un traspaso de negocios:
Se trata de un contrato en el que se produce la sesión de los bienes tangibles de una determinada entidad (es decir, los productos, el mobiliario…) así como los bienes intangibles (la marca, clientes, impacto de la empresa en el mercado, etc.).
Son muy variados, aunque lo más habitual es que se relacione con falta de tiempo para ocuparse del negocio, por la jubilación, enfermedad, aunque hay otros tantos.
El traspaso se lleva a cabo a cambio de un precio que se determinará en el contrato pertinente.
Para poder llevar a cabo el traspaso de un negocio, existe una serie de trámites o documentos que habrá que recopilar, como los siguientes:
Este contrato se formaliza entre el antiguo dueño del negocio y el que va a convertirse en el nuevo.
Dicho contrato tendrá en cuenta aquellos activos que se van a ceder (tanto como si se trata de activos tangibles o intangibles), además de todo lo que tenga el local que sea necesario para la puesta en marca del negocio.
En el precio que se estipula en el contrato también habrá que incluir la infraestructura, la cartera de clientes, el stock con el que se cuenta, etc.
Si estuviésemos hablando de un negocio en el que hiciese falta una licencia, también es posible incluirla en este punto.
En el Artículo 32 de la Ley 29/1994 de Arrendamientos Urbanos se especifica que el arrendatario podrá subarrendar la finca, o hasta ceder el contrato de arrendamiento, sin que necesite el permiso del arrendador.
Ahora bien, si que será necesario que no notifique en el plazo de 30 días, ya que el propietario del local podría pedir un incremento del alquiler de entorno a un 20%.
Una vez que se haya comprobado que todo está en orden con el contrato de arrendamiento, el siguiente paso está relacionado con la licencia de apertura.
Tendremos que recurrir al ayuntamiento del municipio en el que nos encontremos para pedir el cambio de titularidad de la licencia de apertura de nuestro nuevo negocio.
Cuando lo hagas, infórmate de los documentos que te van a pedir, aunque estos son los más comunes:
Llegados a este punto, tan solo podremos comenzar nuestra andadura empresarial si estamos dados de alta como autónomos.
Estas son las modalidades más habituales que podemos escoger tras un traspaso de negocios:
Nuestra recomendación es que dejes todo este tema en manos de un asesor especializado.
Este se encargará de informarte de tus obligaciones fiscales, para evitar ser víctima de una sanción.